La encerrona fiterana a Uxue Barkos - El Reyno Digital

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domingo, 26 de octubre de 2014

La encerrona fiterana a Uxue Barkos









Les pongo en antecedentes para que no se pierdan detalle de la crónica; hace un mes, en una revista especial que se edita con motivo de las fiestas de Fitero, el alcalde y senador por UPN Patxi Yanguas, se destapaba en una entrevista sobre Uxue Barkos, revelando supuestas confidencias que le había regalado en el chupinazo de Tudela, que se pueden entender con esta frase que resume el espíritu de la respuesta: "A mí la polémica sobre el cuartel de Fitero me resbala y lo único que me interesa del tema es usarlo como munición política". Uxue, dolida en su honor, mandó una carta al director de la revista para desmentir la frase de la que se le acusaba. Pero además, la líder de Geroa Bai quiso explicar el pasado viernes a los vecinos de Fitero la polémica pasada. Pero no se encontró a los vecinos de Fitero, sino una colección de figuras de UPN locales de primer orden; el alcalde y senador de UPN con la intención de carearse con la diputada; el teniente alcalde de UPN; ocho concejales de UPN; un ex alcalde de UPN, varias notables "figuras" afines a UPN, etc. Solo faltaba Yolanda Barcina, su lideresa, cuyos escándalos omiten en tertulias de bar con la misma facilidad con la que antes linchaban a Zapatero.

Es decir, UPN en Fitero quiso hacer una demostración de poderío. Tocaron a rebato, y maricón el último. Pero la quedada les salió por la culata, porque Uxue, con unas hechuras presidenciales, explicó en cada careo sus argumentos con una exquisita educación, pese a los gritos o menciones a ETA de algunos señores de UPN. Se equivocaron de rival, que los toreó con señorío, y se equivocaron de convocatoria, con gritos de más de algún afín, con los que lograron evocar un retrato galdosiano del siglo XIX. Por suerte ese Fitero que vimos el viernes es pasado y por suerte el futuro pinta mejor desde un prisa intelectual. El show de manada del viernes evidencia muchas cosas, ninguna de ellas positiva. Pero seguramente los que organizaron la quedada lograron lo que pretendían; amedrentar al adversario. Enhorabuena.